Verano de 1932: un encuentro que cambiará tres vidas.
La del poeta madrileño Pedro Salinas que, mientras trabaja activamente en la creación de la primera universidad internacional, escribe cartas y cartas a la mujer que habrá de inspirar la trilogía de poesía amorosa más importante del siglo XX. La de Katherine Whitmore, la docente estadounidense que se convertirá en el tú con el que dialogan dichas obras y que, pasado el tiempo, deberá enfrentarse a ese amor en vilo y sus consecuencias. Y la de Margarita Bonmatí, la esposa de un poeta que se siente expulsada de su propia vida y de esa nueva poesía y trata de poner fin a su vida. Tres nombres que se cruzan con el mar al fondo y la literatura -la bulliciosa literatura de la generación que cambió para siempre nuestra manera de sentir el verso- en primer plano. Tres personajes y tres realidades: una, erigida sobre el deseo; otra, reducida a escombros, otra, que no podía ser real y que trenzan, como si fueran una, el poema más difícil. Una obra que, desde la pasión por la obra intelectual y poética de Salinas, se interroga sobre la naturaleza errática e imperfecta de ese sentimiento universal y complejo que llamamos amor.